Carrot cake vegano para un dulce cumpleaños

La receta de hoy va dedicada a una persona especial de mi familia que actualmente no vive aquí sino en Estados Unidos, en concreto en Nueva York! Estas navidades vino de visita a Barcelona y justo fue su cumpleaños. No quise perder la ocasión de aparecer en su fiesta de cumpleaños con un carrot cake vegano hecho por mí. La tarta fue todo un éxito e incluso hubo gente que repitió! Es por este motivo que hoy comparto con vosotros la receta del pastel de zanahoria y nueces con glacé de naranja.  Espero que no te importe Alba 😉

Raciones: 10 personas

Dificultad: media

Tiempo: 50 min

 Ingredientes para el pastel:

– 300g de harina de trigo integral

– 100g de aceite de oliva virgen extra (AOVE)

– 100g de azúcar integral de caña

– 1 cucharadita de sal

– 1 cucharadita de bicarbonato

– 1 cucharadita de canela

– 1 cucharadita de jengibre

– 1 cucharadita de impulsor (levadura royal)

– 300g de zanahoria rallada

– ralladura de 1 naranja

– 200ml de agua

– 1 cucharadita de vainilla

– 130g de nueces picadas

 Ingredientes para la naranja glacé:

– 100g azúcar glass

– 100g de zumo de naranja

Elaboración: precalentamos el horno 180ºC. Forramos un molde mediano redondo con papel para horno. En un bol mezclamos la harina, el azúcar, la sal, la canela, el jengibre, el bicarbonato y el impulsor. Por otro lado, cortamos y rallamos las zanahorias bien finas. Pelamos la naranja sin llevarnos la parte blanca y reservamos. A la mezcla inicial incorporamos el aceite, el agua, la vainilla, la zanahoria, la ralladura de naranja y las nueces picadas. Batimos hasta obtener una masa bien homogénea y sin grumitos. Introducimos la masa en el molde y horneamos a 180ºC hasta que esté bien cocida. Para comprobar si la tarta está hecha, pinchamos con un palillo de madera. Éste tiene que salir limpio. De mientras, preparamos la naranja glacé. Para ello, mezclamos el azúcar glass con el zumo de naranja y batimos bien hasta que no queden grumos. Sacamos el pastel del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla. A continuación, cubrimos el pastel con el glaseado. Para la ocasión especial decidí terminar el pastel con una decoración de frutos rojos frescos. Para ello usé 2 fresas cortadas en cuatro, 5-6 arándanos y 2 frambuesas. En el tema de la decoración, la imaginación de uno mismo ayuda a que la presentación sea espectacular!

 Hecho con amor verde-delicioso

Helado cardiosaludable de frutos rojos

Para la receta de hoy me he inspirado en mi último libro que me han regalado (Cocina vegana mediterránea de Laura Kohan). Para los que os guste tanto como a mí el tema del veganismo, os recomiendo su lectura! La primera parte sirve como introducción acerca de lo que es una dieta y alimentación vegana. No se trata solamente de una forma de comer, sino de toda una filosofía de vida. También nos da pautas y tablas sobre como sustituir los ingredientes de origen animal por los de origen vegetal en las recetas veganas, lo cual me parece súper interesante ya que sobretodo en el tema de los dulces muchas veces no sabemos cómo sustituir los huevos o lácteos.

Este fin de semana tuve cena en casa con amigos y tuve que preparar un dulce original y distinto. Para ello elegí hacer un helado de frutos rojos casero, cardiosaludable y diferente…sin lácteos, azúcar ni grasas trans! Por lo que es apto para veganos y vegetarianos, personas con intolerancia a la lactosa y celíacos ya que no contiene gluten. Además, el aguacate es rico en grasas saludables y los frutos rojos son ricos en ácido elágico, que es un poderoso fitoquímico con un gran potencial anticáncer.

Después de lo dicho, vamos a ponernos manos a la masa!

Raciones: 4 personas

Dificultad: baja

Tiempo: 10 min

Congelador: 1-2 horas

Ingredientes:

– 1 aguacate cremoso

– 3 tazas de frutos rojos congelados (en mi caso usé frambuesas)

– 3 cucharadas de sirope de agave (para diabéticos se podría sustituir por fructosa)

Elaboración: pelamos el aguacate y vaciamos el interior. colocamos todos los ingredientes en una batidora o picadora (yo usé la Thermomix) y batimos hasta obtener una mezcla cremosa y sin tropezones. Vertemos la mezcla  en un bol de cerámica o cristal y lo guardamos en el congelador durante 1 o 2 horas. No dejarlo más tiempo del necesario ya que se congelaría demasiado y perderemos la textura cremosa que queremos. Sacamos del congelador y servimos decorando con frutos rojos.

Aunque aún sea invierno, siempre apetece un buen helado y más si está hecho por uno mismo. Así que espero que disfrutéis de este postre que está… riquísimo!

Hecho con amor verde-delicioso

La tentanción convertida en brownie vegano

Primero de todo felicitar el año nuevo a todos los que me leéis! ¿Cómo fueron las fiestas navideñas? Espero que estuvieran llenas de encuentros familiares, con amigos, con viejos conocidos… y llenos de felicidad y momentos que recordar! Y ahora ya sabéis que tenéis delante de vosotros todo un año entero para seguir buscando vuestros sueños y hacer lo que realmente os hace feliz. En mi caso, una de las cosas que me hacen sentirme bien es cocinar y esta semana ha estado llena de inspiración, así que compartiré con vosotros algunas recetas.

La receta que os traigo hoy es un brownie con avellanas. Se trata de un pastel pequeñito de chocolate originario de los Estados Unidos. Se llama así por su color marrón oscuro, brown en inglés. La primera vez que se oyó a hablar de él se remonta en el 1896, pero en lugar de chocolate la receta de aquel entonces llevaba una especie de melaza.

En mi caso, y siguiendo la dinámica de mi blog y mi modo de vivir y ver la vida, os traigo la versión vegana del brownie. Espero que el resultado en vuestra casa sea igual de espectacular que el mío! Así que manos a la masa.

Raciones: aproximadamente 16-20 porciones pequeñas

Dificultad: fácil

Tiempo: 60 min

Ingredientes:

  • 100g harina integral de fuerza
  • 80g aceite de oliva virgen extra (AOVE)
  • 100g azúcar integral de caña
  • 60g gel de lino*
  • 15g almidón de maíz
  • 50ml bebida de avena (se puede usar cualquier bebida vegetal)
  • 1 cucharadita pequeña de extracto de vainilla
  • 2g levadura de repostería
  • 150g chocolate negro (mínimo 70% cacao)
  • 5g cacao puro en polvo
  • 120g avellanas picadas (se puede usar cualquier fruto seco)

Elaboración: precalentamos el horno a 185ºC. Forramos un molde rectangular o cuadrado mediano con papel de horno. Cortamos a pedacitos el chocolate y lo atemperamos a temperatura ambiente. Lo podemos deshacer al baño maría o al microondas, pero siempre controlando que la temperatura no supere los 50ºC. Mezclamos muy bien en un bol el AOVE, azúcar, vainilla y cacao. A la anterior mezcla añadimos el gel de lino, el almidón de maíz y la bebida de avena y removemos bien. Mezclamos la levadura con la harina integral y tamizamos. A continuación añadimos la harina a la mezcla de líquidos en 2-3 veces para que no se formen grumitos. Añadimos el chocolate fundido removiendo constantemente. Por último, añadimos las avellanas picadas. Vertemos la mezcla en el molde y aplanamos la superficie con una espátula. A continuación horneamos 30-40min a 185ºC. Es difícil determinar el tiempo necesario de cocción ya que en el caso del brownie queremos que la superficie quede seca y crujiente mientras el interior permanece un poco húmedo. Por lo tanto, al pincharlo con un palillo éste tiene que salir húmedo, pero no lleno de masa. Transcurrido el tiempo necesario, lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla. Para servir lo cortamos en pedacitos del tamaño 4-5cm de diámetro.

Hecho con amor verde-delicioso

*las semillas de lino son un buen sustituto del huevo. Esta mezcla viscosa nos servirá para aportar agua a la masa y actúa de forma parecida a la clara del huevo. Para hacer 60g de gel de lino necesitaremos 100ml de agua y 1 cucharadita de semillas de lino dorado enteras. Lo ponemos todo a hervir y cuando arranca el hervor, lo dejamos 12-15 minutos a fuego a medio-mínimo. Pasado este tiempo veremos que el líquido empieza a parecer un sirope y se irá formando espuma en la superficie (no la retiramos). A continuación, apagamos el fuego y colamos rápidamente el gel viscoso de las semillas (las podemos guardar para futuras preparaciones). Dejamos enfriar antes

Panellets veganos

Los panellets son un dulce típico de Cataluña y Valencia que tradicionalmente se preparan el 1 de noviembre, festividad de Todos los Santos. Aunque dicha festividad ya la hemos dejado atrás hace un par de semanas, os traigo una receta de panellets sabrosa y original. Los tradicionales se preparan con almendra, huevo y azúcar. En la receta que os traigo he sustituido el huevo por boniato y el azúcar por dátiles.

Los buñuelos de viento, los huesos de santo y los panellets ocuparon las mesas de la mayoría de familias durante la festividad de Todos los Santos. A partir del mazapán base se pueden elaborar panellets de piñones, almendras, coco, avellanas, naranja, limón, yema de huevo, café, fresa o marron glacé. También se elaboran panellets a partir de mazapán basto que se presenta en figuras de castañas, setas, troncos o bandas rellenas con frutas confitadas y membrillo. Por último, a partir de mazapán fino se elaboran de castaña, chocolate y huesos de santo. En este post, os traigo la receta para el mazapán base, a partir del cual elaboré panellets de piñones, almendras y coco.

Yo suelo pensar que siempre es un buen momento para disfrutar en familia cocinando platos sencillos, llenos de vitalidad, colores y texturas diferentes, y cómo no, comiendo el resultado final con tus seres queridos. Así que aprovecha la mañana del domingo para cocinar conmigo unos panellets diferentes pero igual de sabrosos que los convencionales! Y recuerda, al tratarse de un dulce, su consumo debe ser moderado y ocasional, para esos días en los que tenemos algo que celebrar o simplemente nos apetece preparar algo dulce para merendar o desayunar.

Raciones: aproximadamente 30 panellets (3 de cada tipo)

Dificultad: fácil

Tiempo: 10 min

 Ingredientes para la masa:

  • 250g de almendras crudas peladas
  • 500g de boniato
  • Ralladura de 1 limón
  • ½ cucharadita de canela en polvo
  • 6 dátiles
  • Un puñado de semillas de lino molidas

Ingredientes para el rebozado:

  • Piñones
  • Almendra picada
  • Coco rallado

Elaboración: lavamos los boniatos, les hacemos un par de cortes en la superficie y los metemos a cocer en el horno a 180ºC durante 10-15 minutos, hasta que estén blandos. Para saber si están listos pincha con un cuchillo, si puedes atravesarlos con facilidad significa que ya están listos. Deja enfriar, pártelos por la mitad y vacíalos con una cuchara para obtener la pulpa. Tritura las almendras hasta hacerlas harina, añade la pulpa de los boniatos, la canela, la ralladura de limón y los dátiles sin hueso al vaso de la batidora. Tritura hasta obtener una masa de consistencia pegajosa. Dejamos en reposo durante 24h en la nevera para homogeneizar bien la mezcla. En el caso de los panellets de piñones y almendra picada amasamos con las manos y hacemos bolitas de 20-25g. A continuación rebozamos las bolitas con piñones y almendra picada respectivamente. En el caso de los panellets de coco, añadimos coco rallado a la masa y mezclamos. A continuación, «rascamos» la masa un par de veces con las yemas de los dedos para obtener una «montañita». Colocamos los 3 tipos de panellets en una bandeja de horno y horneamos durante 8 minutos a 200ºC para eliminar la humedad de la masa y que sean más similares a los convencionales.

Espero que os guste la receta y probéis de hacerla en casa! Ya me diréis cuál es el resultado 🙂